Esta semana tuve el placer de recoger mi guitarra, una creación del talentoso luthier Alberto Pantoja, quien ha empleado maderas de gran interés en su confección. Es una auténtica joya en sí misma. La madera utilizada es Palo Rosa de Madagascar, y Alberto me reveló que solía ser la elección de los emperadores chinos para la fabricación de muebles de alta calidad. La madera de Palo Rosa es una verdadera belleza, con sus tonos profundos y ricos. 

La guitarra se compone de varios elementos de madera que la hacen única. La tapa está hecha de pino, lo que le proporciona un aspecto claro y luminoso. El mástil, en cambio, es de cedro, que aporta una estabilidad y calidad excepcionales al instrumento. El diapasón, por su parte, está hecho de ébano, lo que le confiere un toque de elegancia y durabilidad. Además, el detalle de la roseta de Nazcar es de una belleza impresionante, añadiendo un toque distintivo al diseño general de la guitarra. Pero eso no es todo, en el puente de la guitarra, Alberto ha tallado una delicada flor de lis, que es un homenaje al arte y la artesanía que ha invertido en esta creación. Una de las características más notables de esta guitarra es su sorprendente calidad sonora. 

Los bajos son poderosos y resonantes, proporcionando un sonido auténtico y cálido de madera que es simplemente encantador. Los agudos, por otro lado, tienen una dulzura melódica que complementa perfectamente los bajos, creando un equilibrio tonal que es asombroso. A pesar de la profundidad de los bajos, la guitarra mantiene una respuesta equilibrada en todo el rango, lo que la convierte en una opción excepcional para músicos de todos los niveles. No solo la calidad sonora es excepcional, sino que la estética de esta guitarra es igualmente impresionante. 

El color del Palo Rosa es simplemente deslumbrante, evocando la riqueza y profundidad del vino tinto de la más alta calidad. Este tono se ve realzado por la tapa clara, creando un contraste visual que es una verdadera obra de arte. Además, los filetes del árbol de naranjo que adornan la guitarra aportan un toque especial y una sensación de calidez al instrumento, elevando su belleza a otro nivel. 

La elección de las maderas y los detalles artesanales de esta guitarra demuestran la dedicación y la maestría de Alberto Pantoja como luthier. Cada elemento ha sido cuidadosamente seleccionado y trabajado para garantizar no solo un instrumento de alta calidad, sino también una obra de arte que se convertirá en una joya para cualquier amante de la música. 

La combinación de las maderas exóticas como el Palo Rosa de Madagascar con la artesanía tradicional crea un instrumento que no solo es un placer para los oídos, sino también una delicia para los ojos. Esta guitarra es un testimonio de la pasión y el compromiso de Alberto Pantoja en su oficio, y estoy agradecido por tener el privilegio de poseer una de sus creaciones. 

En conclusión, mi nueva guitarra, obra maestra de Alberto Pantoja, es un testimonio de la belleza de las maderas exóticas y la artesanía artística. Tanto en términos de sonido como de estética, esta guitarra es una joya que estoy ansioso por explorar y compartir con otros amantes de la música. Cada vez que la toco, me transporta a un mundo de sonidos ricos y profundos, y no puedo evitar admirar la obra de arte que tengo entre mis manos. Estoy emocionado por las posibilidades musicales que esta guitarra me ofrece y ansío compartirla con el mundo. 

En resumen, mi guitarra es mucho más que un simple instrumento musical, es una obra de arte que celebra la belleza de la madera y la pasión de un luthier excepcional